El sociólogo español Roberto Garvia ha investigado el mercado de la lotería en toda Europa desde principios del siglo XVII. Y en el proceso vio un patrón interesante, cuanto más altos son los beneficios, más bajas son las ventas. Esto se observó en Austria y Alemania, y la excepción fueron los lugares donde el juego sindical era popular. Se trata principalmente de España, pero también de Portugal.
Los sindicatos eran predominantemente un juego entre los estratos más pobres de la sociedad, que surgió debido a los constantes precios simples, pero también continuó incluso entonces, que el juego se hizo mucho más asequible. El especialista dice que esto se debe a la interacción social. El juego en grupo entre personas que confían entre sí refuerza los vínculos sociales y los amplía.
Y de hecho, hay muchos ejemplos que lo demuestran. Por ejemplo, la lotería de Navidad es una auténtica tradición nacional, y en muchos países la gente se reúne y juega junta.
Y hoy en día hay algunas historias bastante interesantes en las que un sindicato estaba formado por diferentes personas, pero en un juego de grupo tuvieron éxito.
Los enfermeros han participado en la Lotería Nacional desde su creación, es decir, desde 1994.
Los 6 amigos decidieron comprar boletos para la lotería de Euromillones antes de volar a Holanda. El líder de este sindicato era famoso por su suerte, por lo que los amigos le apoyaban.
Cuando volvieron a casa, se comprobaron los billetes, pero nadie vio la combinación ganadora. Por supuesto, hubo bromas sobre la cabeza. Pero este último resultó ser persistente y decidió volver a comprobarlo todo. Y, efectivamente, tenía sentido, ya que uno de los boletos dio una gran ganancia.
Todo ocurrió el 1 de abril, cuando el jefe del sindicato reunió una pequeña reunión de los participantes. Allí anunció la buena noticia, pero al principio nadie la creyó, pues pensaron que era una broma en honor a la fiesta.
Pero, de hecho, las ganancias fueron bastante grandes y, después del trabajo, los profesores fueron a un pub local para celebrar la victoria.
El sindicato comenzó en 2010. El grupo participó en todos los sorteos de la lotería que se celebraba dos veces por semana. Y en el primer sorteo, determinaron una combinación que no cambiaba regularmente.
Cada uno de los participantes terminó con casi 430.000 libras esterlinas cada uno. Pero casi nadie tenía planes de abandonar. El lugar de trabajo es bastante bueno, así que ¿por qué no seguir?